La pluralidad en el idioma de Suiza:

El plurilingüismo es la facultad de emplear de forma activa o pasiva, varias lenguas. Este fenómeno se da principalmente en regiones fronterizas con diferencias idiomáticas, como en el caso de Suiza, donde el plurilingüismo es llevado al extremo.

Con la llegada de la industrialización, Suiza se vio necesitada de mano de obra, y tuvo que conseguirla en los países cercanos. Estos trabajadores trajeron consigo además su cultura y sus lenguas nativas. La permanencia de aquellos trabajadores, determinó la asimilación de sus lenguas vernáculas

Suiza está dividida en 26 cantones, la mayoría de habla alemana o francesa, pero los idiomas oficiales son cuatro, como ya se mencionó. La proporción de hablantes se ha mantenido constante a través del tiempo, siendo el alemán, el más hablado, con un 63,7%, el francés con un 20,4%, el italiano con 6,5%, y el romanche que solamente es hablado por el 0,5% de la población suiza. La Suiza alemana comprende 18 cantones, y agrupa a la mayoría de la población. La Suiza francesa cuenta con 4 cantones, y la Suiza italiana tiene 1 cantón.

El romanche cuenta además con 5 dialectos, y una sexta variedad que es el romanche estándar.

Esta variedad idiomática, ha provocado que resulte dificultoso para los pobladores de distintos cantones el entenderse. Sumado a esto, en la mayoría de los colegios se enseña el alemán estándar, como manera de homogeneizar las lenguas.

Las divisiones lingüísticas de Suiza corresponden con fronteras geográficas. Es aceptado por la población, que es necesario dominar al menos dos de las lenguas oficiales del país para poder ser entendido en su territorio.

Dado que el plurilingüismo suizo se adquiere en la vida cotidiana, con él se adquieren también rasgos socioculturales, que influyen en la sociedad en general, y que son los que posibilitan la convivencia de los 26 cantones bajo una confederación, a pesar de la diversidad.